Soldados del huachicol: así opera el contrabando de combustible a través de pipas y ferrotanques 
No solo altos mandos de la Secretaría de Marina están vinculados con el tráfico de combustible, sino también elementos del Ejército Mexicano, a pesar de que en su momento el expresidente Andrés Manuel López Obrador dijo que los militares acabarían con la corrupción en las aduanas.
- Redacción AN/ SBH

Por: Carmen Aristegui, Juan Omar Fierro, Lilia Saúl Rodríguez, Sebastián Barragán y Brandon J. Celaya Torres*
La Fiscalía General de la República (FGR) investiga una red de contrabando de combustible, conocido como huachicol fiscal, en la que participan altos mandos militares y que ha operado desde el año 2021 en las aduanas de Piedras Negras, Coahuila, así como en Palomas y Ciudad Juárez, Chihuahua.
Información obtenida por Aristegui Noticias indica que uno de los militares investigados es el coronel en retiro Octavio Othón López Pérez, quien fue separado de su cargo como Administrador de la Aduana de Ciudad Juárez del cargo el pasado 1 de noviembre, de acuerdo con reportes oficiales.
La indagatoria también contempla varias aduanas fronterizas que fueron ocupadas por militares.
Este medio también tuvo acceso a una amplia investigación realizada por una fuente que documenta el esquema de huachicol fiscal en el norte del país, mediante seguimiento de pipas, identificación de patios clandestinos, miles facturas y testimonios, lo que apunta a la complicidad de autoridades de los tres niveles de gobierno, comenzando por los militares que operan aduanas, autoridades fiscales, estatales y hasta municipales.
Para la venta final a estaciones de servicio o gasolineras, los grandes huachicoleros contratan pipas de empresas aparentemente legales como Windstar, Mefra Fletes, Transportadora Aton, Autolíneas Roca, Carvel, Transportes Rápidos Regionales y CZ Fuels, principalmente.
Durante los últimos meses pipas o carros “salchichas” de todas esas empresas han sido aseguradas en las aduanas y en patios clandestinos de almacenamiento y trasvase de combustible, por lo que se encuentran sujetas a investigación de la FGR por su presunta participación en una red de contrabando de tráfico de combustible.
El objetivo de la operación era llevar el combustible a gasolineras que lo venden directamente a automovilistas, entre las que se encuentran marcas como Windstar y Carvel, así como a franquicias de marcas internacionales como Gasolinera 76 y Phillips 66, las cuales pagan por el uso de las marcas registradas, pero que no operan directamente las compañías transnacionales.
Uno de los documentos compartidos con este medio, fue el seguimiento con un GPS a una pipa transportadora de hidrocarburos desde el Paso, Texas en Estados Unidos, a Ciudad Juárez, Chihuahua en México, donde visitó una gasolinera con la marca Phillips 66.
Posteriormente, su recorrido se extendió a Camargo, Chihuahua; Torreón, Coahuila; Fresnillo, Zacatecas y la capital de Aguascalientes, descargando combustible en cada parada, para posteriormente regresar a Estados Unidos.
Otro seguimiento con GPS a una pipa arrojó un recorrido de Ciudad Juárez, Chihuahua, a un patio clandestino de Piedras Negras, una ruta inusual para el reparto de combustible que buscaba evitar inspecciones de la autoridad, de acuerdo con la fuente consultada.
Así funciona el huachicol fiscal verde olivo
En el esquema del huachicol fiscal operado con la complicidad de militares, Aristegui Noticias identificó dos compañías comercializadoras que ofrecían grandes cantidades de diesel y gasolina proveniente del contrabando a grupos gasolineros y líneas de transportistas en el norte y noroeste de México.
Se trata de Petro Soluciones, representada legalmente por Mario Alberto Valdez Luna, e Ingemar, vinculada al exgobernador Ernesto Ruffo Appel, los cuales vendían grandes cantidades de combustible introducidos a México mediante pipas y ferrotanques que no pagaban el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) correspondiente.
El ex gobernador ha dicho en medios nacionales que no ha sido citado en ningún momento y que el uso de su nombre ha sido politizado, ya que de la empresa Ingemar dice no ser el único socio.
Petro Soluciones e Ingemar ya eran investigadas por casos previos de tráfico de combustible, como el caso de los buquetanques que descargaron gasolina y diesel en el puerto de Ensenada, Baja California, y de los vagones de ferrocarril o ferrotanques cargados con huachicol que fueron incautados en Coahuila, por lo que hay más de una línea de investigación en contra de sus socios y representantes legales.
En este esquema, las importadoras compran el combustible de forma legal en Estados Unidos a refinerías o plantas de almacenamiento. Los compradores mexicanos presentan la Carta Porte y el pedimento de importación que señalan el destino de la carga.
Posteriormente, la gasolina y el diésel se introducen a México mediante pipas o carros tanque de ferrocarril, pero alterando o falsificando dichos documentos para reportar que la carga es aceite quemado, aditivo para aceite, alcohol o cualquier otra sustancia que no implique el pago de IEPS.
De esta forma, las empresas importadoras evaden el pago del impuesto. Con esa maniobra, la gasolina y el diésel bajan su precio 6.45 y 7.00 pesos, respectivamente, con respecto al mercado nacional.
Por ejemplo, un empleado de Petro Soluciones ofreció el 11 de marzo de 2025 diésel a 21.80 el litro en un patio clandestino de Ensenada, Baja California, fecha en la que el precio más bajo ofrecido por Pemex a mayoristas era de 22.40 pesos, de acuerdo con la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco).
“Tenemos 9 millones de litros de diésel en Ensenada, en patio, se bajaron el día de ayer”, señala un “kit fiscal”, un paquete de documentos que los intermediarios enviaron a un cliente potencial de huachicol entregado a Aristegui Noticias durante esta investigación.
En el caso de Ingemar, a la citada empresa se le relaciona con el aseguramiento de 129 carrotanques que transportaban más de 15 millones de litros de huachicol fiscal ocurrido en Ramos Arizpe y Saltillo, Coahuila, el pasado 7 de julio.
De acuerdo con la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, las unidades no contaban con los documentos para acreditar el traslado y la procedencia lícita de combustibles.
Un representante de Ingemar también ofreció gasolina y diesel de contrabando a un posible comprador, comunicación de la que este medio tiene copia.
Patios, puntos intermedios del huachicol
Tras la importación de Estados Unidos, el combustible es almacenado en patios clandestinos, donde es resguardado previo a su comercialización en entidades como Chihuahua, Coahuila, Tamaulipas, Sonora, Sinaloa, Baja California, Baja California Sur, Zacatecas, Aguascalientes y Veracruz.
Se trata de terrenos con tanques y sistemas de bombeo improvisados para hacer el trasvase de combustible. Por ejemplo, en los límites de Nava y Piedras Negras opera uno de estos lugares en un terreno de tierra, junto a una nave industrial, violando visiblemente la NOM-006-ASEA-2017, misma que establece las especificaciones técnicas y criterios de seguridad que deben cumplirse en las instalaciones terrestres de almacenamiento de petróleo crudo y petrolíferos
De acuerdo con las investigaciones realizadas por este medio, no existen registros oficiales en materia Energética o de Medio Ambiente que avalen el funcionamiento de estos espacios.
El Registro Público de la Comisión Nacional de Energía (CNE) indica que todos los permisos concedidos en Piedras Negras y Nava corresponden a plantas de almacenamiento y estaciones de carburación para la venta de GAS LP.
Entre las empresas que han usado estos patios se encuentran Atom, Mefra Fletes, Windstar y Carvel, entre otras.
Además, Aristegui Noticias revisó miles de facturas que comprueban los vínculos y operaciones financieras entre las empresas investigadas por presunto huachicol fiscal con compañías fantasma, estaciones de servicio y brokers del huachicol fiscal, en un complejo entramado que mezcla operaciones legales con irregulares.
El coronel huachicolero
Fuentes ministeriales señalan que la salida del coronel Octavio Othón López Pérez de la aduana de Ciudad Juárez se dio tras el decomiso de al menos nueve pipas de la marca Windstar cargadas con huachicol, las cuales fueron interceptadas en un doble retén de la FGR y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudad a la salida de la zona aduanera, operativo que se dispuso ante las sospechas de corrupción del mando militar.
López Pérez llegó al cargo de administrador de la Aduana de Ciudad Juárez en mayo de 2025, tras cinco meses de gestión de su compañero —también militar en retiro— Benito Cegueda Hernández.
Ambos fueron colocados bajo la titularidad del general André Georges Foullon Van Lissum, titular de la Agencia Nacional de Aduanas de México (ANAM) durante el gobierno del entonces presidente Andrés López Obrador.
López Pérez al igual que Cegueda Hernández fueron mencionados este año en medios locales de Chihuahua como personas vinculadas a investigaciones relacionadas con actos de corrupción.
En Declaranet, el sitio web donde los funcionarios públicos colocan sus declaraciones patrimoniales, tanto Cegueda como López nunca aparecieron como encargados de la administración en Ciudad Juárez, Chihuahua.
Previo a la salida del coronel, diversas notas periodísticas ya lo vinculaban con operaciones de huachicol fiscal y tráfico de armas cuando fue responsable de la aduana en Palomas, Chihuahua, de la que salió en mayo del 2025 para dirigir la aduana de Ciudad Juárez.
Tras ser separado del cargo, el coronel Octavio Othón López Pérez se habría quejado ante el secretario de la Defensa Nacional, Ricardo Trevilla Trejo, por su “desvinculación de la Aduana de Ciudad Juárez”.
El mando militar habríaa argumentado en su defensa que su salida fue consecuencia de una denuncia por presunto contrabando de combustible que él mismo presentó apuntando a responsabilidades de las autoridades civiles.
Sin embargo, hay evidencia de que su estancia al frente de la aduana en Ciudad Juárez, estaba siendo cuestionada.
Desde el pasado 30 de julio, el titular de la Agencia Nacional de Aduanas de México, Rafael Fernando Marín Mollinedo, giró un oficio para acotar el mando del general retirado, otorgando a Rafael Buenrostro Martín, subdirector de Operación Aduanera, la responsabilidad de asignar los roles y turnos en la aduana de Ciudad Juárez.
Dicho oficio fue publicado por Calibre 800, un noticiero de radio Chihuahua, y Aristegui Noticias pudo confirmar su autenticidad.
Fuentes ministeriales también revelaron que el coronel retirado está vinculado con el empresario René Díaz Ramos, alias “La Rana”, señalado como contrabandista y “fayuquero” en una nota del semanario Zeta de Tijuana.
La investigación de huachicol fiscal de Aristegui Noticias revela que no solo altos mandos de la Secretaría de Marina están vinculados con el tráfico de combustible, sino también elementos del Ejército Mexicano, a pesar de que en su momento el expresidente Andrés Manuel López Obrador dijo que los militares acabarían con la corrupción en las aduanas.
*#SoldadosdelHuachicol: Una investigación de la Unidad de Investigaciones Especiales de Aristegui Noticias.










