Quien espía a defensores de derechos labora para ‘el maligno’: arzobispo
Dijo que la defensa de los derechos humanos no debe ser un estorbo para nadie.
- Redacción AN / KC

El arzobispo de San Luis Potosí, Jorge Alberto Cavazos Arizpe, condenó que el gobierno mexicano utilizó el programa Pegasus para espiar a miembros del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh).
En entrevista con un medio de comunicación local, refirió que la defensa de los derechos de las personas orilla a padecer este tipo de intimidaciones que se convierten a la larga en reflexiones para mantener la solidaridad.
En una alusión religiosa al daño, el arzobispo mencionó que quien actuó en contra de Santiago Aguirre y María Luisa Aguilar, director y coordinadora del Área Internacional del Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez (Centro Prodh) laboran “para el maligno”.
“Así es el mal en el mundo, no se justifica, creo que es una oportunidad para que todos reflexionemos a quién estamos sirviendo, a la vida, a la hermandad, a la paz, al apoyo, a la solidaridad y a la caridad o al mal, a la violencia y por lo tanto al maligno”.
El Centro de Derechos Humanos Miguel Agustín Pro Juárez A.C. (Centro Prodh) fue fundado en 1988 por la Compañía de Jesús, el grupo religioso jesuita, con la finalidad de participar de la defensa de los derechos humanos de la comunidad.
Ante ello, el arzobispo Cavazos Arizpe destacó que la actividad humanitaria —principalmente la que realiza la iglesia católica— no debe representar un estorbo para nadie, en el entendido de que el espionaje busca disminuir el impacto de ciertas actividades, en este caso de la defensa de derechos.
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Los ataques a los defensores de esta asociación han ocurrido, en épocas recientes, desde el gobierno de Enrique Peña Nieto y actualmente en el de Andrés Manuel López Obrador, aunque en ninguno de los casos ha habido investigación y sanciones.
Los teléfonos de las víctimas de espionaje recibieron una alerta de Apple en diciembre de 2022, notificando que habrían sufrido una intromisión ilegal por “atacantes patrocinados por el Estado”.
Santiago Aguirre fue atacado con Pegasus en el año 2016, por lo que fue sujeto de espionaje ya en dos sexenios.

