‘Los adultos necesitamos ser intuitivos para que los niños desarrollen un pensamiento crítico’: Sara Bertrand 
La escritora chilena publica en México ‘Álbum familiar’, su nuevo libro infantil.
- Redacción AN / HG

Por Héctor González
“Me cuesta separar de la escritura de lo visual”, reconoce Sara Bertrand (1970). Periodista y narradora chilena, buena parte de su carrera la ha dedicado a publicar libros infantiles y juveniles como El oro de la corona, Y llovieron ranas y Álbum familiar (Ediciones El Naranjo), ésta última recién publicada en México.
A través de la novela, la escritora reconstruye, por medio de viejas fotografías, la fragmentada memoria de una familia durante la dictadura pinochetista. Para Bertrand la familia en sí misma es un relato, por tanto, funciona como un territorio donde los grandes temas universales pueden ser contados para niños, jóvenes y adultos.
¿Qué relación tienes con Álbum familiar?
El origen del libro está en el cuarenta aniversario de la dictadura en Chile. Se desclasificaron documentos de prensa y la televisión dedicó cuatro semanas a transmitir imágenes de estos archivos. Junto con mis hijos vimos parte de esos materiales, ellos no tenían mucha noción de la dictadura y Pinochet les parecía un personaje risible. Me pareció mucha la distancia no solo emocional sino histórica entre una generación y otra. Por eso me propuse contar lo que se sentía vivir en una dictadura.
¿Por qué contarlo a partir de un álbum fotográfico?
No podía contar una historia lineal porque no tenía todos los datos. Los silencios de los padres son un problema para la infancia, con tal de proteger no cuentan todo u omiten eventos y al final el niño rellena los huecos a su manera. Lo más honesto me parecía hacerlo como un álbum porque te permite leerlo sin un orden determinado.
Pero también hay un sustento pedagógico relacionado con la forma en que hacemos memoria por medio de las imágenes.
Para mí, un disparador de escritura siempre es una imagen. Supongo que así seleccionamos la información que recogemos del mundo. La escritura como la fotografía te permite seleccionar ciertas imágenes. En realidad, la literatura está presente en todas las disciplinas artísticas porque todas tienen una narrativa o relato.
¿Cómo hablar a los niños o jóvenes de temas como la dictadura o el narcotráfico?
Los adultos debemos asumir la tarea de ser mediadores del mundo respecto a los niños y jóvenes. Si no lo hacemos corremos el riesgo de dejarles un cúmulo de información desordenada que no tiene relación con la realidad. Los adultos necesitamos ser intuitivos durante el camino que los forma para que desarrollen un pensamiento crítico, en este sentido los libros y el arte en general son muy importantes.
A través de Álbum familiar o de Afuera has hablado de los distintos tipos de familia posibles y de su importancia. ¿Por qué te interesa como tema?
La familia es núcleo de relaciones donde se ve un poco todo lo que sucede en el mundo. Afuera es un libro escrito del lado de las mujeres. Me interesaba tocar cómo se produce la herencia femenina y por qué de pronto cuesta reivindicar sus derechos y su lugar. Una familia también es un relato y puede estar marcado por cierto autoritarismo, machismo o feminismo, te ofrece una narrativa contra la que incluso a veces hay que pelear.
¿Qué retos te implica escribir para niños en una época como la actual?
En la medida en que el material sea de buena calidad da un poco lo mismo cómo se genera. Si queremos alimentarnos intelectualmente hay que darles narraciones que les permitan generar sus propios pensamientos. No veo que una buena serie compita con un libro, ambos son válidos, por eso es importante que un adulto acompañe al niño durante la exposición a un videojuego, una serie o una novela.

